El Programa para construir resiliencia en comunidades vulnerables a la inseguridad alimentaria y crisis climática (PRO-Resiliencia) busca proveer herramientas que les permitan mejorar las condiciones de vida a largo plazo a unas 30 mil personas de comunidades de El Progreso, Chiquimula y Zacapa.  PRO-Resiliencia es ejecutado por el Programa Mundial de Alimentos (WFP por sus siglas en inglés) con un financiamiento de EUR15 millones de la Unión Europea y se ejecutará durante cuatro años.

Tendrá un enfoque especial de trabajo con mujeres y busca apoyar a través de un enfoque integral de desarrollo a las familias que han sufrido de forma constante los efectos del cambio climático. Las actividades estarán enfocadas en desarrollar proyectos que ayuden a generar ingresos económicos, producir alimentos de forma permanente y que les brinden herramientas necesarias para enfrentar los efectos del cambio climático.  Los componentes del programa son: promoción agrícola y no agrícola, conservación de recursos naturales, fortalecimiento de capacidades e intervenciones sensibles a la nutrición con enfoque de género.  Las actividades se trabajarán en coordinación con otros actores clave como instituciones gubernamentales, sector privado, financiero, cooperativas, academia y asociaciones de productores, entre otras.